Programa Líderes: La similitud cultural entre España y Brasil facilita la interacción

La III Edición del Programa Líderes Brasileños, organizada por la Fundación Consejo España-Brasil en diciembre de 2016 en Madrid y Canarias, tuvo la ciencia y la tecnología, y la colaboración bilateral en este campo, como eje fundamental. La Fundación Consejo publica periódicamente entrevistas con sus participantes.

Licenciado en Astronomía por la Universidad Federal de Río de Janeiro, Reinaldo Ramos ejerce actualmente como investigador en el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE). Es también el actual presidente de la Sociedad Astronómica Brasileña.

Brasil fue en 2016 el país invitado en la XII Reunión Científica de la Sociedad Española de Astronomía, durante la cual se repasaron los proyectos conjuntos entre ambos países. ¿Cuál es su valoración de la colaboración científica entre España y Brasil actualmente?
En este momento existen iniciativas de grupos de Brasil y España que colaboran en proyectos bastante grandes. Existen otras colaboraciones menores: trabajos individuales de investigadores brasileños y españoles. Yo mismo llevo trabajando desde hace al menos 10 años con dos investigadores españoles. Y sigue creciendo esa interacción entre España y Brasil.

¿De qué forma podría mejorarse esta colaboración?
Para nosotros, España es un ejemplo de cómo mejorar y hacer crecer una comunidad científica de manera orgánica. Desde que entró en Europa años atrás, España ha experimentado un crecimiento muy acelerado, y se está desarrollando cada vez más.

Esto demuestra que, cada vez más, lo importante son las colaboraciones internacionales, a través de varios mecanismos: intercambio de estudiantes en ambas direcciones, investigadores que realizan estancias cortas, de uno o dos años, también en ambas direcciones…

Principalmente, con este Programa Líderes Brasileños, lo que podemos llegar a conseguir es la creación de colaboraciones bilaterales, formales, entre los dos países. Que exista un plan de inversiones que establezca qué se quiere conseguir y en qué plazo. Ahora mismo lo que hay son actuaciones eventuales, no existe un programa bien definido. En este sentido el Programa de la Fundación Consejo España-Brasil está excepcionalmente bien organizado.

¿Cuál es el nivel de las colaboraciones España-Brasil con respecto a otros países?
En astrofísica, desde un punto de vista general, ciertamente España es uno de los principales colaboradores de Brasil en Europa. La astrofísica brasileña comenzó a desarrollarse en la década de los 70, y los primeros que se formaron en esta disciplina lo hicieron en Francia. Por eso siempre ha existido un gran intercambio entre brasileños y franceses. Pero eso está cambiando con el tiempo. Según pasan las décadas, cada vez hay más colaboraciones de brasileños con españoles, con alemanes…

De hace 30 años hasta hoy se ha establecido un mapa de colaboraciones con todos los países europeos. En el caso de España, está la cuestión de la semejanza cultural, quizá incluso mayor que con Portugal, lo cual sorprende desde el punto de vista histórico, y eso hace que cada vez vayan surgiendo más colaboraciones entre brasileños y españoles. De ahí la importancia de establecer un programa a largo plazo que pueda beneficiar a estudiantes e investigadores de ambos países.

¿Cómo considera que es la investigación científica iberoamericana actualmente? ¿Puede mantenerse al nivel de otras regiones del planeta?
Hoy en día la astrofísica en particular es una ciencia muy cara desde el punto de vista instrumental: los telescopios y otros instrumentos son muy costosos. Pero ha habido un cambio muy grande en la forma en que se hace ciencia hoy en día. Hace 40 años un astrónomo tenía su telescopio para hacer observaciones y todo el proceso de investigación. Ya no es así.

Lo que ocurre ahora es que se hacen grandes proyectos, como un mapa de todo el cielo, y los datos se ponen a disposición de todo el mundo. Un ejemplo es el Sloan Digital Sky Survey (SDSS), una de las bases de datos más importantes en astrofísica, hecha por los americanos, pero cuyas publicaciones no son específicamente de americanos, sino de astrofísicos de todo el mundo.

Desde ese punto de vista, en Brasil, España… cualquier investigador de astrofísica compite de igual a igual con cualquier otro grupo, sin un dominio específico de ningún país. La globalización ha provocado esto: los datos están a disposición de cualquiera. Las competencias, las habilidades… se expanden como un todo. No existe el dominio de ningún país. Claro que algunos países tienen mayor tradición, o hacen más inversiones. Estados Unidos es un país, en comparación con Brasil, con muchos más astrónomos. Evidentemente su producción será mucho mayor. Pero el nivel de las investigaciones que pueden hacer y las que se pueden hacer en Brasil o España es el mismo.

Muchos investigadores se quejan de la excesiva burocratización del sector, que les ocupa demasiado tiempo que podría dedicarse a la investigación. ¿Cree que es un problema en nuestros países? ¿Cómo podría mejorarse esta situación?
Es una cuestión extremadamente compleja. En Brasil todavía tenemos una forma de hacer investigación muy burocratizada. Por paradójico que pueda parecer, si un investigador consigue recibir recursos grandes para una investigación, él mismo tiene que encargarse de gestionar dichos recursos.

Este cuadro está cambiando, pero muy lentamente. El investigador todavía pierde mucho tiempo con las gestiones del propio proyecto y toda la burocracia. Esto afecta a todo el mundo académico, no sólo a la astrofísica. Es una cuestión compleja, porque cambiarlo pasa también por una cuestión de actitud gubernamental, así como por un cambio de actitud de los propios académicos, que precisan una forma más efectiva de conseguir recursos para investigación que no sean necesariamente gubernamentales.

En fin, la cuestión es complicada, pero se aprecia una tendencia a cambiar la forma de hacer investigación. Se debe tender a optimizar cada vez más el tiempo del que dispone el investigador para hacer su función, en lugar de perder un tiempo considerable en tareas administrativas.

Con respecto a este Programa Líderes, ¿qué aspectos del mismo le han resultado más interesantes?
La parte inicial del Programa, en La Palma y Tenerife, fue para mí, en cierta forma, la confirmación de lo que imaginaba que iba a ser. Sí me ha resultado sorprendente comprobar cómo ambos observatorios tienen una estructura fundamental muy sólida, así como los laboratorios que vimos en Tenerife, de un altísimo nivel. Y la astronomía lo requiere: no es sólo la labor del investigador; la ciencia precisa de una inversión en instrumental. Y la inversión en instrumental parte de una base: los laboratorios, con requerimientos muy específicos para su desarrollo…

Para mí ha sido sorprendente ese punto de vista, y confirma ese crecimiento estructural de la astrofísica española. No es sólo una cuestión de producir archivos: toda estructura debe crecer a la vez, es fundamental. No es posible que crezca la comunidad científica sin tener un fundamento establecido. Y el fundamento es una estructura bien organizada, sólida, que muestra un desarrollo global, y no simplemente individuos haciendo ciencia. Desde ese punto de vista mi experiencia en esos primeros días fue excepcional.

¿Cree que esta iniciativa de la Fundación Consejo España-Brasil puede ayudar a mejorar la colaboración científica entre ambos países? ¿Qué otras iniciativas cree que podría ser interesante llevar a cabo?
No tengo dudas de que esta iniciativa ayudará a promover cada vez más interacciones entre España y Brasil. Pienso que tal vez deberíamos, desde Brasil, hacer algo similar. Hacer este tipo de conexión, como hace España: traer personas que, en cierta forma, asumen una responsabilidad: venir aquí y entender la estructura.

España tiene una mayor estructura que Brasil desde ese punto de vista, pero puede ser interesante también tener investigadores españoles que vayan a Brasil para conocer cuáles son las circunstancias que hay allí. Trabajando con colegas se aprende más que trabajando solo.

Gracias a esta similitud de culturas se facilita mucho la interacción. Yo trabajé varios años con un ingeniero de Tenerife y fue un trabajo espectacular. Aprendimos mucho el uno del otro. Era la primera vez que trabajaba con alguien en España y fue un gran éxito. Es mucho más fácil trabajar con alguien de quien entiendes su cultura.

Así que creo que una planificación España-Brasil, Brasil-España alentaría más colaboraciones. Las colaboraciones surgen así, cuando los investigadores están en el mismo ambiente, pensando sobre las mismas cosas, y ahí surgen las ideas, y los desarrollos de nuevas tecnologías, etcétera. Creo que por parte brasileña debería haber programas similares, organizados de la misma forma que ha hecho la Fundación Consejo España-Brasil, que es brillante. Absolutamente impecable.

Resumen de actividades del Programa Líderes Brasileños 2016